jueves, 22 de enero de 2015

Atardecer en París, Nicolas Barreau


Pont Alexandre III
Atardecer en París me hizo viajar a esa ciudad hermosa y poder seguir la historia paso a paso (literalmente). Una de las cosas que tiene el libro es esa, que te explica dónde están y por donde pasan. El que ame París va a amar este libro.
No es un libro corto, digamos que tiene pocas páginas (porque para mi "muchas páginas" son 500 y este libro tiene alrededor de 300) pero tiene tanto contenido que puede que si te atrapa tanto como a mi lo termines en dos días.
Yo como apasionada de todos los lugares que nombró Alain, los buscaba en Google cada vez que aparecía alguno nuevo y fue algo mágico.


Redondeando en lo importante de la novela que para mí fue la "intriga" que hubo a cada momento, tengo que decir que me hizo sufrir y que me llevo tanto la desesperación por saber qué iba a pasar con Mélanie que tuve algunos gritos en los que mi mamá se asustaba je je je pero fue parte de todo.

Desde que Mélanie no apareció en el Cinéma Paradis y cuando se empezó a dudar de qué le habría sucedido tuve corazonadas (falsas, ¡por suerte!) pensando que el libro tenía una inclinación a la película de "Medianoche en París" en el que los personajes ficticios que aparecen a la medianoche en París no eran, por ahí decirlo, reales (perdón la ignorancia es que no me atrapó esa película desde un principio y no la terminé). Y me puse muy triste, pensé que fue una pérdida de tiempo y que todo lo original del personaje principal y de la chica del abrigo rojo se tiraba por la borda pero no fue así y termino contenta con este libro tan maravilloso; me encantó como terminó todo y la idea de que a la llegada de Solène y Allan surge la desaparición de Mélanie le puso algo de ficticion a este libro pero solo un toque, y fue lo suficiente para que hasta el final me quede sin habla y sin comentarios en mi cuenta de Goodreads.


Me encantaron los personajes, ame cada momento de Alain y cada sentimiento, calculado y bien escrito.

Me hizo desesperarme, reír, sonreír y al final después de las emociones lloré. Me alegre tanto por cómo terminaron las cosas y este libro tiene una marca enorme, de ahora en mas, en mi cabeza.
Nicolas Barreau un imaginario increíble.